Destacado
- Obtener vínculo
- Correo electrónico
- Otras apps
C118: El Caso de Suzhou
El objetivo
Lao Zhao era un soldado de guardia fuera del
puesto.
En lo que a él respectaba, las grandes
peleas, la corrupción y el soborno del magistrado del condado y el censor
imperial, no eran de su incumbencia.
El hombrecito debería tener la forma de
vida sobria, siempre que pueda tomar una copa de vino caliente después del
trabajo, una esposa que lo mantenga caliente y sus amigos con quienes hablar,
estaría satisfecho.
(N/T: ¿Qué
lo mantenga caliente? ¿qué es? ¿una manta eléctrica o que pedo?)
Pero la gente así tenía sus propios chismes.
Por ejemplo, Lao Zhao y los otros hombres de
guardia en el puesto, en los últimos días, habían sentido particularmente
curiosidad por la hermosa mujer traída por Censor Imperial Tang y habían
especulado más de una vez sobre su identidad.
Algunos decían que la belleza era una
concubina de la familia del Maestro Tang que, incapaz de soportar los celos de
la familia mayor, había visto al Maestro Tang ir al sur a hacer un recado y se
había escapado con él y lo había seguido hasta aquí.
Otros decían que la belleza fue un regalo de
otro funcionario al Censor Imperial Tang, y que él estaba tan enamorado de ella
que no podía dejarla sola y debía tenerla con él en todo momento.
También se dijo que la belleza era en
realidad una mujer virtuosa que había sido tomada por la fuerza por el Censor
Imperial Tang, que había sido enviada en una misión para investigar la hambruna
en Wujiang el año pasado. También era un funcionario corrupto.
Los rumores pronto se difundieron por la
estación oficial y poco a poco se difundieron.
Pero no importaba cuán extraño y absurdo fuera
el contenido, Lao Zhao y sus colegas reconocieron dos cosas.
Una era que la belleza era realmente
hermosa, tan asombrosamente hermosa que casi aplastaba el alma.
Había muchas bellezas en Suzhou y Hangzhou,
Lao Zhao y sus colegas nacieron y se criaron en Suzhou, pensaron que habían
visto mucho mundo, a diferencia de los campesinos, pero la belleza al lado de
Tang Fan era tan hermosa, tan hermosa que Lao Zhao y sus colegas no podían
imaginar cómo describir su belleza con su pobre vocabulario.
Cuando la vieron por primera vez, solo
pudieron observar con asombro cómo la belleza era llevada a la estación por
Tang Fan con una brisa fragante, riéndose después de lo fuera de lugar que
habían estado, pero cuando vieron al Censor Imperial Yang, que también vivía ahí,
teniendo una reacción similar a la belleza, inmediatamente se equilibraron sus
pensamientos: no era que los hombres no hubieran visto el mundo, era que la
belleza era demasiado hermosa.
Tang Fan recogió una flor, más delicada que
una peonía, y se debía decir que todos estaban celosos.
Lo segundo que se reconocía es que el Censor
Imperial Tang mimaba tanto a esta belleza que casi la ató a la cintura de sus
pantalones y la llevó consigo en todo momento.
En los pocos días que Lao Zhao estaba de
servicio, cada vez que el Censor Imperial Tang salía, no importaba a dónde
fuera, a cualquier tipo de negocio, la llevaba consigo, incluso a la oficina
del Magistrado Prefecto.
Pero
eso no era sorprendente, habrían muerto por tal belleza, también eran humanos,
¿qué tiene eso de extraño?
Es concebible que cuando el Censor Imperial
Tang regresará a la capital, se llevará la belleza con él y si la familia de Censor
Imperial Tang no era estricta, la belleza reinaría sobre la casa del Censor
Imperial Tang.
Pero, de nuevo, una mujer tan hermosa, no en
el harén del Emperador sino en manos de un Censor Imperial de cuarto rango, ¡me
pregunto si el Censor Imperial Tang podrá aferrarse a ella!
Aunque Tang Fan tuvo cuidado de hacer que
Xiao Wu usara un velo para ocultar su rostro cuando salía ¿quién podía ser
engañado por su esbelta figura? en unos días, casi la mitad de Wuxian sabía que
Tang Fan tenía una belleza deslumbrante que entraba, salía, comía y dormía con
él.
Cada hombre, en el fondo de su corazón, se
preguntaba por la buena fortuna de Tang Fan.
Pero para Xiao Wu, era una historia
diferente.
Ella no sabía que Tang Fan sabía quién era
ella, solo hacía lo que Chen Luan le dijo que hiciera, quedarse a su lado y
desacreditarlo, incluso si no estuviera casado, debía hacer que pareciera que
Xiao Wu se había convertido en la obsesión de Tang Fan.
Ahora el plan estaba llegando a buen puerto
y Tang Fan estaba realmente enamorado de ella, pero Xiao Wu no estaba contenta.
Porque Tang Fan, tan enamorado como estaba
de ella, tenía que cumplir la promesa de un caballero, aparte de un pequeño
abrazo y una pequeña caricia, no iban más allá de eso.
(N/T:
Obvio, chica. ¿no sientes la muerte cerca o qué?)
Pero eso no era gran cosa, Xiao Wu había visto
muchos caballeros autoproclamados y no era extraño que Tang Fan fuera así, era
la otra cosa que molestaba a Xiao Wu.
A Tang Fan ahora le gustaba, tanto que no podía
dejarla sola, no solo tenía que llevarla con él cuando salía, incluso cuando
ella se iba a hacer sus necesidades por un momento, volvió a ver a Tang Fan
mirando a su alrededor con el rostro frenético buscándole y gritando: “A-Wu, ¿a
dónde has ido? Si no te veo, no puedo hacer nada”.
A Xiao Wu originalmente le gustaba el
hermoso rostro y la gracia de Tang Fan, pero después de pasar tiempo con él,
descubrió que debajo de su piel había una naturaleza tan pegajosa, había sido hostigada
durante mucho tiempo que su apetito se había ido, no había forma de que pudiera
gustarle él.
El
único consuelo fue que Tang Fan no la evitaba en nada, incluidos los asuntos oficiales.
Entonces, en estos días, Xiao Wu no solo se
enteraba de que el magistrado prefecto de Suzhou, Hu Wenzao, se había pasado al
lado de Tang Fan, sino también que el gran patrocinador de Tang Fan era, de
hecho, el ex almirante del Western Depot, Wang Zhi. Tang Fan también le dijo
que el oro y el tesoro enviados por la Cámara de Comercio de Suzhou habían sido
enviados por él al Eunuco Wang en la capital.
Pero Xiao Wu estaba tan frustrada, porque
Tang Fan la estaba hostigando tanto y porque la mirada del Jinyiwei a su alrededor
era tan poderosa, que desde que ingresó a la estación oficial, no tuvo
oportunidad de enviar un mensaje a Chen Luan.
La única vez que logró enviar un mensaje en
la Casa del Gobernador, mientras Tang Fan la sacaba, fue cuando se escapó, pero
no obtuvo respuesta de Chen Luan.
Xiao Wu comenzó a entrar en pánico.
No temía no poder completar la tarea que
Chen Luan le había encomendado, sino que Chen Luan creyera los rumores que
circulaban, que estaba enamorada de Tang Fan y que lo traicionará apoyándose de
este.
Nadie sabía mejor que ella, sabía lo desconfiado
y despiadado que era Chen Luan.
Solo mirar el número cada vez menor de
víctimas fuera de Wujiang, con fines de lucro, Chen Luan había engañado incluso
al Emperador y al Comisionado Imperial de la corte imperial, ¿Qué sería de ella
una pobre mujer?
Incluso si era hermosa, la diferencia entre
un hombre y una mujer era que, en el mejor de los casos, era un objeto desechable
o un objeto de mayor valor.
Estaba tan perturbada que incluso Tang Fan
lo notó y pensó que estaba enferma y no solo le trajo el medicamento él mismo,
sino que también se quedó junto a su cama.
Si hubiera sido cualquier otra mujer, un
esposo tan amoroso la habría conmovido.
Pero a Xiao Wu no le generó nada de eso.
Cuanto más bueno era Tang Fan, más temía que
Chen Luan dudará de su lealtad.
Al mirar su rostro pálido y demacrado desde
su sueño ligero, la preocupación de Tang Fan era abrumadora.
“A-Wu, ¿qué te pasa? ¿Hay algo en tu mente?
Dime. Aunque no soy un funcionario de Suzhou, siempre puedo resolver tus
problemas, si sigues así, ¡mi corazón me matará!"
Su expresión era sincera y Xiao Wu,
preocupada, no se sentía mal pero seguía pensando en cómo deshacerse de Tang
Fan y salir a informar.
Xiao Wu sonrió de mala gana y dijo: "Mi
Señor, estoy un poco congestionada, quiero acostarme un rato".
Tang Fan le tocó la frente, le peinó el
cabello detrás de la oreja y dijo suavemente: "Entonces me quedaré
contigo".
¡No necesito tu compañía!
Xiao Wu casi dijo esto con los dientes
apretados, pero sus sentidos aún estaban intactos y se tragó las palabras, como
un bocado de sangre.
Llamaron a la puerta.
Tang Fan se levantó y abrió la puerta y vio
al guardia oficial que entraba con un tazón de medicina y dijo: “Mi señor. Mi
señor, aquí está la medicina que pidió, ¡acaba de ser hecha!"
"Déjala." Tang Fan asintió,
naturalmente, no era tan afectuoso con el hombre como lo era con Xiao Wu.
“A-Wu, toma esta medicina, es para calmar tu
mente, bébela y podrás dormir bien, estarás bien cuando te despiertes. “Tang
Fan tomó el tazón y la levantó con cuidado.
En su posición de cuarto rango apropiado, no
le fue fácil hacer esto.
Si hubiera sido otra mujer, podría haber
sido tentada, pero el corazón de Xiao Wu no lo estaba en absoluto.
"Lo hare yo misma" Xiao Wu tomó el
tazón de sopa e inclinó la cabeza para beber.
Pero Tang Fan dijo de repente: "¡Espera!"
Volvió a tomar el tazón de la mano de Xiao
Wu, con un poco más de fuerza, de modo que parte de la sopa se derramó sobre
ambas manos.
Tang Fan gritó: “¡Di Han! ¿Está Di Han aquí?
"El subordinado está aquí" Llegó
una voz profunda desde el exterior.
Tang Fan dijo: "Ve por un perro o trae
un gato".
Di Han no hizo más preguntas y dijo:
"Sí".
La atención de Xiao Wu finalmente fue
desviada por él y dijo: "¿Qué estás...?"
Tang Fan dijo: "Creo que el sabor de
este medicamento no es el adecuado".
Xiao Wu se sorprendió por un momento.
Tang Fan dijo: "Y el tipo que trajo la
medicina, se veía extraño, entró, te miró con una mirada extraña, eso fue
inusual".
Xiao Wu estaba a punto de hacer una broma,
que estaba haciendo un escándalo, pero luego recordó algo y de repente su
rostro se puso blanco.
Di Han pronto llegó con un cachorro en sus
brazos y, a la señal de Tang Fan, tomó el tazón de medicina y lo vertió en la
boca del cachorro.
(N/T:
Ay, por Dios, ¡nooo!)
En poco tiempo, el cachorro gimió, parecía
rodar en los brazos de Di Han de dolor, tan pronto como Di Han lo soltó, el
cachorro cayó al suelo, sus extremidades se movieron un par de veces y dejó de
moverse.
Tang Fan estaba furioso y dijo:
"Alguien realmente quiere matarme, pero ¿por qué no a mí, sino lastimar a
A-Wu?"
Di Han dijo: “Quizás pensaron que con la
muerte de la señorita Xiao, podrían confundir al señor y revelar su debilidad.
"Tang Fan se dio la vuelta, tratando de consolar a Xiao Wu y notó que su
rostro se estaba volviendo cada vez más blanco y se sorprendió y tomó su mano,
también fría y dijo:" A-Wu, ¿qué te pasa? "
Xiao Wu no respondió, su cuerpo tembló, fue
tomada en los brazos de Tang Fan, todavía en silencio.
Tang Fan le dio unas palmaditas en la
espalda y dijo en voz baja: "¡Está bien, está bien!"
Después de tranquilizar a Xiao Wu durante
mucho tiempo, hasta que se volvió a acostar, Tang Fan salió y regresó a su
habitación.
Acababa de entrar y alguien más lo siguió.
Tang Fan no tuvo que mirar atrás para saber
quién era y dijo con voz amarga: "Si sales y entras así, nadie pensará que
eres un sirviente común, ¡será fácil de descubrir!"
Di Han dijo: "No soy solo un sirviente
común, soy un guardia personal".
Intencional o involuntariamente, aumentó el
tono de la palabra "personal", pero sus ojos estaban
fijos en Tang Fan.
Tang
Fan apretó el puño contra sus labios y tosió: "Todavía no he tenido la
oportunidad de preguntarte, ¿cómo pudiste salir de la capital para venir a
verme tan fácilmente?"
Di Han
dijo: "Algo sucedió en Jiangxi, Su Majestad me pidió que lo tratará
personalmente, así que vine por Suzhou para verte".
Tang Fan le regaño airadamente:
"¡Falsedad para beneficio personal!"
Una sonrisa apareció en los ojos de Di Han y
dijo: “¿Y si ese es el caso? Yan Li y los demás, se han adelantado, te he extrañado
mucho”.
Estas palabras sencillas y sin adornos de la
boca del otro, más efectivas que la mirada llorosa de Xiao Wu, instantáneamente
hicieron que el hermoso rostro del Maestro Tang se sonrojara levemente.
Di Han extendió la mano y la pasó por encima
del hombro y la volvió a bajar, para descansar sobre el dorso de la mano.
Un dedo le hizo cosquillas en la palma y,
como era de esperar, la mano se estremeció.
Pero Di Han reaccionó más rápido y antes de
que pudiera retirarla, hizo un agarre firme.
Piel con piel, encontró que los nudillos de
Tang Fan eran largos y uniformes, como el día que tocó el pie de su compañero.
No cabía duda de que se trataba de manos que
estaban destinadas a ser utilizadas para hacer una escritura hermosa.
Tang Fan dijo, algo avergonzado:
"¡Vamos, pongámonos manos a la obra!"
Dicho eso, no se separaron.
Di Han parecía saber que tenía la piel
particularmente delgada a este respecto y no se burlaba mucho, solo se rio un
poco y dijo: "Xiao Wu ahora debe pensar que Chen Luan le dio ese tazón de
veneno".
Tang Fan reflexionó: “Xiao Wu es una persona
que sabe pensar por sí misma y es más astuta que la mujer promedio, esta vez
sola, no la engañará y no será suficiente para tomar una decisión. Necesitamos
hacerle entender dos cosas: una es que Chen Luan será derribado, no hay
posibilidad y dos es que Chen Luan ahora sospecha de ella y quiere matarla,
incluso si piensa en Chen Luan, no la tomará en serio nuevamente".
Di Han dijo: "¿Qué quieres hacer?"
Tang Fan sonrió sabiamente y dijo: "Me
gustaría pedirte un favor, organizar un buen espectáculo para convencerla por
completo".
Di Han dijo: "Con una condición".
Tang Fan dijo: "¿Eh?"
Di Han dijo: "Deja de abrazarla".
Tang Fan: "..."
Xiao Wu pasó la noche en un estado de inquietud,
una serie de pesadillas.
A la mañana siguiente, Tang Fan se acercó a
ella y le dijo: "A-Wu, este lugar es demasiado peligroso, ¡tengo que
llevarte a la capital lo antes posible y salir de aquí!"
Xiao
Wu se congeló por un momento y dijo: “¿Los asuntos de Su Excelencia están
terminados? ¿No quieres derribar a Chen Luan?"
Tang Fan le sonrió misteriosamente y dijo:
"Está casi hecho, entregué la evidencia de Chen Luan, ¡solo estoy
esperando un decreto de la capital para hacerlo serio!"
Xiao Wu estaba completamente confundida.
Debido a su posición, sabía mucho sobre Chen
Luan y sabía por qué Chen Luan había hecho tanto alboroto.
No solo porque Chen Luan tenía un tío que era
el ministro del Ministerio de Hacienda de Nanjing, sino también porque Chen
Luan pagaba mucha piedad filial a la capital todos los años.
Para decirlo sin rodeos, Chen Luan, el
emperador de la tierra, no solo estaba involucrado con el Eastern Depot a
través de la Cámara de Comercio de Suzhou, sino que él y su tío también eran
miembros de la facción Wan.
Debido a esto, Chen Luan estaba vendiendo
grano oficial en Wujiang y colaborando con Yang Ji, incluso Tang Fan, el
Comisionado Imperial, no fue tomado en serio.
Por temor a su poder, el magistrado prefecto
de Suzhou, Hu Wenzao, tampoco se atrevió a hablar al principio, pero debido a
que Chen Luan y sus hombres fueron arrastrados como un escudo, Hu Wenzao nunca
habría querido cooperar con Tang Fan.
La Noble Consorte Wan, en quien confiaba la
facción Wan, ahora no tenía hijo, pero se dijo que se había aliado con la Consorte
Shaoshi, para apoyar a su hijo como Príncipe Heredero y para alentar al Emperador
a abolir al actual Príncipe Heredero a la Corona.
Xiao Wu sabía mucho de Chen Luan, por lo que
no pensó que Tang Fan solo podría derribar a Chen Luan, incluso con Wang Zhi
detrás de él, no sería suficiente.
Porque no era Chen Luan a quien Tang Fan buscaba,
era el hombre grande, complicado y poderoso detrás de él.
Ahora que Tang Fan había jurado que era
capaz de lidiar con Chen Luan, Xiao Wu estaba atónita y su primera reacción era
de incredulidad.
Pero dado el enamoramiento de Tang Fan
consigo misma, nunca le mentiría.
Entonces Xiao Wu preguntó: "¿Qué
evidencia incriminatoria tenía el Señor sobre Chen Luan?"
Tan pronto como terminó de hablar, pareció
darse cuenta de algo e inclinó la cabeza avergonzada y dijo: "Perdón,
estaba fuera de lugar".
Tang
Fan no estaba preocupado, tomó su mano y dijo: "Como te dije antes, detrás
de este Chen Luan está la facción de la Noble Consorte Wan, incluido el actual
Consejero Privado Wan’An y el hermano de la Noble Consorte, Wan Tong y otros,
¿recuerdas?"
Cuando Xiao Wu asintió con la cabeza,
agregó: "De hecho, era fácil de decir, la única persona con la que quería
tratar era Chen Luan, no había intención de involucrar a la facción Wan, Chen
Luan, sin importar cuán arrogante fuera era solo un peón de la facción Wan, sin
él, el magistrado jefe del condado de Wujiang es un peón. El magistrado jefe
del condado de Wujiang aún puede ser reemplazado, no es un puesto importante".
El corazón de Xiao Wu estaba alborotado,
pero solo pudo decir con una mirada tímida en su rostro: "Pero ... ¿No es
el tío de Chen Luan el Ministro del Ministerio de Ingresos de Nanjing? ¿Se
quedará al margen y dejará que su sobrino sea acusado por usted?"
Tang Fan se rió y dijo: "Puedo decirte,
tengo algunos antiguos amigos en la capital, que han sido expulsados a
Nanjing por la facción Wan, uno de ellos es el ex Ministro del Ministerio de
Justicia, Zhang Ying, él ha encontrado evidencia de la corrupción del ministro
Chen y lo ha acusado, ese ministro ahora estaba demasiado ocupado para
preocuparse por sí mismo, ¿cómo podría preocuparse por su sobrino?”
Xiao Wu tartamudeó: "¿Esto va a
funcionar?"
Tang Fan dijo lánguidamente: “¿Cómo puede no
funcionar? El resto es demasiado para que lo entiendas, en resumen, todo lo que
necesitas saber es que la facción Wan puede ser poderosa, pero tienen muchos
escrúpulos, mientras no luches contra ellos hasta la muerte, no pelearán. Chen
Luan es solo un rey en Wujiang, si pierde a su tío, ya no lo será... ¿Qué vale
sin su tío? No tiene acceso a Hu Wenzao, no sabe lo que estoy haciendo, planea
entregarme a través de la facción Wan, incluso podrían decir que estoy
aceptando sobornos en Wujiang y me entrego al libertinaje... ¡Pero Chen Luan no
lo sabe, ya le he entregado el dinero a Su Majestad!”
Y con
eso se rió, en tono de burla hacia Chen Luan.
Pero Xiao Wu no podía reír.
Las palabras realmente volvieron loco su
corazón y no pudo calmarse durante mucho tiempo.
Xiao Wu tuvo que admitir que había mucha
verdad en lo que le dijeron.
Ella solo vio el lado sin ley de Chen Luan,
sin darse cuenta de que, a los ojos de un Comisionado Imperial como Tang Fan de
la capital, Chen Luan no era infalible.
Diferentes perspectivas, diferentes visiones
del problema.
Chen Luan era un hombre guapo y bueno con
Xiao Wu, pero era igualmente despiadado, Xiao Wu no lo amaba, solo estaba
preocupada por su propio futuro.
Si derribaban a Chen Luan, ¿qué haría?
El veneno de ayer la había perseguido,
aunque Tang Fan y los demás pensaron que el veneno estaba dirigido a Tang Fan,
no a Xiao Wu, pero solo Xiao Wu lo sabía, podría ser que Chen Luan sintiera que
lo había traicionado y por eso no podía esperar para matarla.
Pensando en esto, Xiao Wu no pudo evitar
morderse el labio inferior.
"A-Wu, ¿qué te pasa?" La voz de Tang
Fan la devolvió a sus sentidos.
"Estoy bien" dijo Xiao Wu con una
sonrisa forzada.
"Has estado tan distraída últimamente,
¿no quieres seguirme de regreso a la capital?" dijo Tang Fan con el ceño
fruncido.
"No es..." Xiao Wu negó con la
cabeza, "Tengo suerte de estar contigo. Es solo que he tenido algo de
congestión en el pecho últimamente y con el casi envenenamiento de la última
vez, estaba realmente aterrorizada".
Con eso, se acurrucó en los brazos de Tang
Fan, como si quisiera sacar algo de seguridad de él.
Tang Fan la rodeó con sus brazos, pensando
que esto era un abrazo, se justificaba por que el no lo había iniciado, incluso
para una mujer hermosa, era mucho drama.
Pero el rostro seguía siendo tan suave como
el agua y decía: "Las joyas que hice la última vez deberían estar listas,
¿te gustaría verlas? Si hay algo malo en ellas, puedes pedirles que las
cambien".
Xiao Wu realmente no quería salir, pero
ahora su mente estaba cambiando lentamente, desde el comienzo de una falsa
pretensión con Tang Fan, hasta un deseo real de apoyarse en él, por lo que
sonrió suavemente y dijo: "Lo haré. Haz lo que quieras."
Ella volvió a susurrar: "Es toda mi
culpa que haya estado enferma durante tantos días y no haya podido servirte,
yo, yo ..."
Mientras decía esto, Xiao Wu se sonrojó.
De hecho, Tang Fan no la tocó, haciendo gala
de ser un caballero y Xiao Wu estaba feliz de mantenerlo entretenido, porque
Xiao Wu conocía la psicología de los hombres y sabía que en este mundo,
aquellos que son fáciles de conseguir no serán apreciados demasiado. La
naturaleza humana era barata y los hombres lo eran aún más con las mujeres,
cuanto más reservada era Xiao Wu, más la amaba Tang Fan, más la apreciaba.
Entonces,
aunque tenían sus propios pensamientos, ambos terminaron en paz y Xiao Wu nunca
sospechó del comportamiento de Tang Fan.
"Chica tonta ..." Tang Fan dijo en
voz baja, "Tu salud es la mejor recompensa para mí, ¿no sabes lo que
siento por ti?"
Xiao Wu parecía conmovida.
Debido a su debilidad, Tang Fan encontró una
capa para que se la pusiera antes de sacarla.
No viajaban en carruaje, solo llevaban a Di
Han con ellos, por lo que viajaron a la ligera.
Pero Xiao Wu todavía estaba en estado de
shock después del veneno.
"Mi señor, solo tiene al sargento Di
con usted, ¿es seguro?"
"Verás..." Tang Fan sonrió y le
explicó: "Aunque Di Han es solo uno, puede derrotar a docenas de hombres
sin una gota de sudor, ¿no sabes? Sus habilidades marciales, incluso Su
Majestad lo ha elogiado, de lo contrario, ¿cómo podría haber sido enviado por Xue
Qianhu?
Xiao Wu se sorprendió y se rió: "Parece
que su Excelencia tiene una buena relación con los Jinyiwei, incluso este tipo
de talento puede ser secundado aquí".
Las palabras fueron tentativas, Tang Fan no
estaba al tanto de ellas, en cambio asintió con la cabeza y dijo: "No voy
a mentir, estoy muy cerca del Jinyiwei, hasta el administrador de la Oficina
Administrativa del Norte, me sigue a todos lados. Ni siquiera puedo deshacerme
de él, si no fuera por la otra misión de Su Majestad esta vez, él habría venido
conmigo".
Esto parecía ser una exageración, pero Tang
Fan ahora estaba acompañado por el Jinyiwei, no exactamente un alarde, por lo
que Xiao Wu estaba convencida y tuvo más cuidado en su corazón.
Di Han, que los seguía, los miraba, como si
su conversación no fuera asunto suyo.
Los tres se quedaron en la Casa de Yin por
un tiempo y cuando Xiao Wu terminó de elegir sus joyas, Tang Fan salió con
ella.
"Todavía es temprano en el día,
busquemos una casa de té para sentarnos, es casi la hora de almorzar, si
regresamos, tendrás que quedarte en la estación nuevamente, será
aburrido". Tang Fan se rio.
Xiao Wu, por supuesto, no tuvo objeciones.
“Hare lo que me diga, Señor”
Pero antes de que pudiera terminar su
oración, ocurrió un cambio.
Tres hombres llegaron a Tang Fan y Xiao Wu
desde tres direcciones, directamente frente a ellos, a la izquierda y a la
derecha, con cuchillas afiladas en sus manos y un feroz porte.
Xiao Wu está completamente aturdida, no sabe
nada de kung fu, parpadeó, la atraparon desprevenida y solo pudo mirar mientras
esto sucedía.
¡Aún más aterrador, se dio cuenta de que el
objetivo no era Tang Fan sino ella misma!
...
NOTA
DE TRADUCTORA:
El momento romántico me paso por alto por
que aun sigo angustiada por que envenenaron a un cachorro solo para engañar a
la ojete esa.
ANTERIOR INDICE SIGUIENTE
- Obtener vínculo
- Correo electrónico
- Otras apps
TE PUEDE INTERESAR...
CAN CI PIN (CCP)
- Obtener vínculo
- Correo electrónico
- Otras apps
REENCARNACIÓN DEL PODEROSO CORTESANO (RPC)
- Obtener vínculo
- Correo electrónico
- Otras apps
Comentarios
Publicar un comentario