Ir al contenido principal

Click en la imagen para ver las bases

Destacado

¡¡LEE ESTO PRIMERO!!

Capítulo 29



El heredero es joven y vigoroso

 

Yu She no podía imaginar lo difícil que había sido el apresurado viaje de Zhong Wan a Qian’An.

Sin dinero o documentos de viaje, ¿cuánto sufrimiento experimentó en esos pocos meses?

El joven Yu She había sido originalmente capaz de consolarse a sí mismo. Zhong Wan al menos llevaba consigo algunas cosas de Yu She para venderlas por dinero.

Pero con el paso de los años, esas cosas volvieron a las manos de Yu She una por una.

Y esas cosas estaban impolutas.

Como si las cosas hubieran sido simples entre ellos todo el tiempo. Sin ninguna conexión especial.

Una vez más, a Yu She le empezó a doler la cabeza. En la incomodidad, se dio vuelta en la cama, un prolongado suspiro escapó de sus labios.

El mayordomo Feng mantuvo la vigilancia afuera. Podía oír a Yu She dando vueltas, y entró en la habitación sin hacer ruido. Susurró:

"Heredero, Heredero, ¿ha vuelto a tener una pesadilla?"

"No", dijo Yu She de manera indiferente. "Todavía no me he dormido."

El mayordomo Feng se preocupaba de que fuera infeliz y volviera a hacer algo. Preguntó:

"¿Entonces debo encender el incienso para dormir?"

Yu She dijo impaciente: "¿Crees que soy él?"

El mayordomo Feng sonrió.

"Sí. El joven maestro Zhong es verdaderamente débil contra la medicina. Cada vez, un poco de incienso lo dejaría fuera de combate".

Yu She miró por la ventana, más allá de la visión cercana, como si estuviera recordando algo más.

Dudó sobre si debía usar el incienso para dormir. Realmente no quería que el Zhong Wan de su mente lo perturbara. Irritado, dijo:

"Deja de mirarme. No tengo energía para hacer nada en este momento."

Esas palabras eran verdaderas. Cada vez que Yu She había causado algún problema, después se calmaba por un tiempo.

Había causado problemas con Xuan Qiong. Por lo menos durante medio mes, no tendría la necesidad de suicidarse.

El mayordomo Feng se preocupó en secreto. Podía sentir que Yu She tampoco quería hacer tal cosa.

¿Quién se atormentaría a sí mismo si su vida iba bien?

Sin embargo, él había sufrido demasiado. Después de un tiempo, parecería como si no pudiera soportarlo más, y encontraría algo para desahogar sus sentimientos.

El mayordomo Feng se acercó a la cama para ayudar a Yu She a subir las sábanas. Vio que Yu Shez todavía tenía los ojos abiertos y dijo suavemente:

"La gente que escoltaba al Joven Amo Zhong ya ha regresado. Han presentado sus respetos al Príncipe Qian’An en lugar de al heredero. Según el mayordomo de la casa del Príncipe Qian’An, la enfermedad del Príncipe Qian’An se agravó."

Yu She cerró los ojos.

"Es muy probable que esté fingiendo."

El mayordomo Feng rio secamente.

"No está garantizado".

"Tiene prisa por volver a Qian’An" Yu She frunció el ceño. "Ayer cuando Zhong Wan entró en el palacio, quiso pedirle al emperador permiso para salir por Xuan Rui y los demás." Sonrió burlonamente.

"Hablando de eso, la vida de Xuan Rui es buena. Una persona tan inútil sobrevivió inesperadamente hasta ahora."

Con un agudo sentido del olfato, el mayordomo Feng pudo oler un indicio de algo no completamente agrio, pero tampoco amargo.

Debía haber algo. Dijo suavemente:

"En realidad, en ese entonces el heredero no tenía que dejar que el joven maestro Zhong se fuera".

Yu She era el que más odiaba escuchar estas palabras. Tan pronto como lo hizo, frunció el ceño.

"Lo he dicho muchas veces antes que no podía."

El mayordomo Feng vio una abertura e inmediatamente la tomó.

"¡Pero ahora mismo, esto no es seguro! En este momento, ¿no podríamos realmente mantenerlo aquí?"

Una vez más, Yu She se quedó en silencio.

Un rato más tarde dijo con voz suave, "Aunque pudiera conservarlo, no puedo protegerlo".

Por un momento, el mayordomo Feng lo encontró difícil de soportar. Lleno de ansiedad, preguntó:

"Heredero, ¿estás seguro de que no vivirás mucho tiempo?"

"Sí", respondió Yu She, tranquilo.

El mayordomo Feng realmente deseaba poder golpearlo.

Por el contrario, Yu She al decir esas palabras, se sentía bien. Uso sus brazos como almohadas. Luego después de un tiempo, dijo:

“Además... lo odio. Si el se queda a mi lado, quien podría saber cuándo mi enfermedad aparezca de nuevo y lo estrangule hasta la muerte”

El mayordomo Feng estaba angustiado.

“¿Por qué Su honorabilísimo lo odia? ¿por las historias y mentiras que el contó en los pasados dos años?”

"No". Yu She entrecerró los ojos. "Odio que claramente pueda vivir una vida tranquila y sosegada, pero insiste en ser sincero con cualquiera."

El mayordomo Feng se rio a pesar de sí mismo.

"¿No son esos los puntos buenos del Joven Amo Zhong?"

"Sí. Esa es una razón más para no retenerlo aquí." Yu She respiró profundamente. "Si no tuviera este tipo de personalidad, entonces anoche, yo habría..."

El mayordomo Feng sintió como si hubiera escuchado algo importante. Se apresuró a preguntar:

"¡¿qué hay de anoche?!"

(N/T: jajaja pinche chismoso... pero, continua...)

Un rastro de odio pasó por los ojos de Yu She.

"Anoche, yo lo habría hecho".

La rabia llenó al mayordomo Feng. ¡¡Entonces deberías haberlo hecho!!  

El mayordomo Feng se sintió resentido con Yu She por no cumplir sus expectativas.

"Entonces, en esas cuatro horas de anoche, lo que hizo... lo que hizo el heredero..."

"No lo toqué, pero..." Yu She frunció el ceño y vaciló antes de decir: "Pero sí lo hice, también".

El mayordomo Feng estaba ansioso al extremo y temía molestar a Yu Shez al preguntar. Sólo podía tomarse su tiempo para decir descaradamente:

"¿Tocar qué?"

Durante mucho tiempo, Yu She guardó silencio. Luego dijo:

"Un beso".

Sorprendido, el camarero Feng soltó, "¿Be... beso?"

Mirando a otro lado, Yu She dijo:

"Lo hizo él mismo".

El mayordomo Feng fue golpeado hasta el extremo (ósea se shockeo el pobre).

"¿Lo hizo él mismo?"

Zhong Wan había estado durmiendo como un muerto. ¿Cómo lo pudo hacer por sí mismo?

"¡Sólo le cambiaba la túnica exterior!" dijo Yu Shez, sombrío. "Y tenía una apariencia tan indecente. Entonces... dijo mi nombre (el de cortesía)".

El mayordomo Feng se quedó sin palabras.

Realmente quería ayudar a Zhong Wan a entender lo que le pasó. De una manera extremadamente cuidadosa, preguntó por él:

"¿Cómo fue... indecente?"

Yu She juntó sus cejas mientras miraba al mayordomo Feng.

"¿Por qué preguntas sobre esto?"

El mayordomo Feng saltó del miedo. Forzando una sonrisa, dijo:

"Este viejo esclavo simplemente no puede entender por qué una persona como el Joven Amo Zhong no puede conducirse con dignidad."

Yu She quería decir algo, pero luego se contuvo. En su lugar, dijo:

"En resumen... tenía una apariencia muy indecente".

Recordó que la última vez que Zhong Wan lo criticó duramente, parecía estar excitado. Y la garganta de Yu She se secó. Se movío con incomodidad.

"En primer lugar, sólo quería echarle un vistazo. Pero insistió en provocarme... Se lo merecía."

"Se lo merece. Se lo merecía de verdad. ¡No hay que tener en cuenta su decencia! ¡No hay que tener en cuenta su autoestima!" El mayordomo Feng aceptó amargamente.

Se lo merecía de verdad, ¡pero Su honorabilísimo sólo lo besó!

El mayordomo Feng dudó una y otra vez. Temía que Yu She no supiera algunas cosas. Consciente de la expresión de  él, dijo suavemente:

"Hablando de eso, el Heredero ya no es joven. Hace unos años, la Princesa Real preguntó a este viejo esclavo si era el momento de organizar a unas sirvientas para enseñar al heredero sobre asuntos de la carne. Este viejo esclavo adivinó que el Heredero no querría a la gente de la Princesa, así que rechazó la oferta. Ahora que este viejo esclavo lo recuerda, ¿deberíamos conseguir algunas sirvientas adecuadas y mayores (1) para...?"

De repente, Yu She estaba mirando al mayordomo Feng.

"No hay necesidad de traer gente para enseñarme. Soy conocedor de tales asuntos."

"Sí, sí, sí". El mayordomo Feng se asustó mortalmente. "El heredero naturalmente lo sabe".

Desconcertado, Yu She miró fijamente al mayordomo Feng, de nuevo.

"¿Piensan en esto todos los días? No soy como la gente normal, pero no soy tan malo como para no entender esto. Ya lo entendía completamente cuando era adolescente."

El mayordomo Feng dijo en voz alta: "Entendido, entendido, entendido".

"No traigas a esas personas extrañas a mi habitación". Yu She siguió mirando fijamente al mayordomo, tomando precauciones. "No quiero mujeres ni tendré descendencia. Si veo gente que no debería ver en mi residencia... la estrangularé en un instante."

El corazón del mayordomo Feng tembló.

"Entonces el heredero..."

Yu She ni siquiera necesitó pensar en ello.

"Por supuesto que no necesito esto más."

El mayordomo Feng quería decir algo, antes de dudar.

"Para el joven maestro Zhong, el heredero es claramente..."

Yu She frunció sus cejas.

"¡Le besé porque no se comportó con dignidad!"

Casi convenció a Feng.

El mayordomo murmuró para sí mismo:

"Sí, es el propio joven maestro Zhong quien coqueteó en sus sueños muy bien ¿Realmente dijo el nombre de cortesía del heredero en su sueño? Si esto no es ser frívolo, ¿entonces qué es? El heredero es joven. ¿Cuándo conocería a este tipo de persona? ¡Es inevitable que se confundiera con el Joven Amo Zhong! ¡Que se haya atrevido a decir esto en su sueño deja claro que está permitiendo que el Heredero le haga cosas!"

Yu She lo encontró razonable, su humor mejoró un poco.

El mayordomo Feng dijo: "Por eso el heredero se tomó las libertades que se merecía".

Estos asuntos habían perturbado a Yu She, haciéndole sentir incómodo. Sin embargo, en este momento, se había recuperado completamente.

Cerró los ojos.

"Exactamente".

El mayordomo Feng se moría por golpear a Yu She. Asumiendo con rabia entre dientes apretados, dijo:

"Ya que no pudo soportarlo, entonces por qué el heredero no... sólo..."

Irritado, Yu She dijo:

"Si él no pudo soportarlo, ¿significa eso automáticamente que yo tampoco pude? También... Después de eso, se puso muy contento con su suerte, yaciendo en mi abrazo dormido de una manera muy relajada"

El Joven Príncipe Yu fue claro en cuanto a las recompensas y los castigos. El mayordomo Feng no tenía nada que decir.

Yu She usó este meticuloso análisis para aliviar su propia ansiedad, y se sentía mucho más a gusto. Se levantó las mantas sobre sí mismo.

"Estoy cansado. Puedes retirarte"

Él se fue.

Sintió que las cosas no podían seguir así.

Escribió otra carta a Zhong Wan.

En la casa del Príncipe Qian’An, Zhong Wan había despedido a los sirvientes y estaba empezando a hablar con Xuan Congxin.

No había regresado en toda la noche. Preocupado hasta el extremo, Xuan Congzin le preguntó repetidamente qué había pasado.

"Ayer... Ugh, no quiero hablar de ello. Un desastre." Se rio a pesar de sí mismo. "Tengo que hablarte de unos asuntos de verdad".

Xuan Congxin prácticamente no había dormido en toda la noche, y miró a Zhong Wan de manera reprobatoria.

Entonces, con infinita de paciencia, dijo, "Habla".

"Ayer, originalmente quise pedirle al emperador que permitiera a tu hermano regresar a Qian’An. Desafortunadamente, otros asuntos habían surgido y lo estropearon. En ese momento, el Quinto Príncipe, Xuan Qiong, casi se ahoga en un estanque, y no se sabe qué ocurrió. Su Majestad ciertamente no tenía la energía para ocuparse de nuestros asuntos."

Zhong Wan tenía un dolor de cabeza terrible.

"Otro príncipe imperial tuvo un accidente. Si seguimos pidiendo volver a Qian’An, podría producirse el efecto contrario al deseado, inspirando la sospecha del emperador. Lo que quiero decir es..."

Zhong Wan hizo una pausa. Luego dijo, "Usé el nombre de Xuan Yu para enviar una solicitud, en el que se leía que Xuan Rui estaba muy enfermo, y como tal pidió que se le permitiera regresar primero a Qian’An."

Xuan Congxin frunció el ceño. "¿Sólo permiso para que mi hermano mayor regrese?"

"El cumpleaños de Su Majestad aún no ha llegado, pero los accidentes ocurren en la capital uno tras otro. Si nos vamos todos juntos, atraería demasiada atención. El emperador es desconfiado. Me temo que pensará que la propiedad del Príncipe Qian’An es una confabulación." Zhong Wan dijo impotente: "Cuando llegue ese momento, ninguno de nosotros podrá irse".

Xuan Congxin fue incapaz de entender los asuntos más profundos como Zhong Wan. Sin embargo, ella asintió de manera vacilante.

"El emperador no mataría niños", Zhong Wan la tranquilizó ligeramente. "Eres una niña, así que es aún más seguro".

Xuan Congxin no parecía más feliz después de escuchar estas palabras. Bajando la cabeza, dijo: "Esto lo sé".

Zhong Wan dijo, "Conmigo alrededor, todos ustedes definitivamente estarán a salvo. Así que dejemos que tu hermano mayor se vaya primero, ¿de acuerdo?"

Una sonrisa apareció en los labios de Xuan Congxin.

"Para ti hacer tal juramento conmigo y planear todo esto, obviamente será el método más seguro. El mejor método para nosotros. Estaré de acuerdo con tu plan, pero..."

Zhong Wan y Xuan Congxin dijeron al mismo tiempo:

"No hay necesidad de decírselo a Xuan Yu".

Los dos se rieron.

Un suspiro dejó los labios de Xuan Congxin.

"Yo también soy inútil.”

"Ya es bastante bueno que no sospeches un poco de mí." Sonrió. "Tu hermano mayor se irá pronto, así que no discutas con él en estos dos días. Dale el abrigo de piel de zorro que le estabas haciendo."

Xuan Congxin asintió.  De repente, dijo, "¿Qué tal si regresas a Qian’An con él? Antes dijo que el emperador no nos haría nada. Después del cumpleaños de Su Majestad, puedo volver con Xuan Yu."

"¿Cómo podemos hacer eso?" Zhong Wan ni siquiera lo pensó. No pudo evitar reírse. "Cuando el Príncipe vea desde el cielo que os he dejado aquí, me golpeará con un rayo en mitad de la noche."

Por un momento, una ola de tristeza bañó a Xuan Congxin. Ella sabía que no podía mantener su patrimonio y ya no fue locuaz. Forzó una sonrisa.

"Bueno, todavía no te has casado con esa joven. Ahora que se menciona... ¿dónde está? Han pasado muchos días, pero aún no he visto ninguna acción de su parte"

Ahora que el tema de conversación llegó a esto, Zhong Wan sufrió otro dolor de cabeza.

"Tal vez... no está yendo bien. Es muy difícil de manejar."

Descontenta, Xuan Congxin dijo, "¡¿Y qué es lo que no le gusta?!"

"No lo culpe (2) " Zhong Wan sonrió amargamente. "El... Cuando era jóven, sufrió mucho. Ahora su personalidad no es muy piadosa. Necesito esforzarme más".

Xuan Congxin pensó por un momento, y luego asintió con la cabeza en señal de comprensión.

"Se está haciendo vieja y su cuerpo es alto y robusto. Por eso es más sensible que los demás. Ya que te gusta tanto, entonces intenta con todas tus fuerzas."

Mientras Zhong Wan sonreía una vez más, alguien golpeó afuera. Zhong Wan permitió que esa persona entrara.

Era un mensajero con una carta del mayordomo Feng. 

Recibió la carta y la abrió delante de Xuan Congxin. Después de que terminó de leerla, su expresión cambió varias veces. Casi dijo una groseria delante de Xuan Congxin.

Ella escudriñó la expresión de Zhong Wan. Probablemente preguntó,

"¿Es... una carta de esa joven?"

Zhong Wan asintió con mucha dificultad.

Xuang Congxin pensó, esta chica es realmente valiente.

"¿Qué dice ella?"

Inmensamente desanimado, Zhong Wan respondió: "Dice que no le gusta lo indecente que soy".

Xuan Congxin palideció de miedo. 

Zhong Wan hizo un movimiento con su mano, pidiéndole que regresara a su residencia. Xuan Congxin se sorprendió de lo abierta que era la cultura en la capital. Se fue mientras aún se aferraba a su asombro.

Una vez que salió de su residencia, Zhong Wan recogió la carta de nuevo. No estaba seguro de si sus ojos habían cometido un error. Mientras sus manos temblaban, leyó cuidadosamente la carta una vez más...

"El Heredero dijo que el Joven Amo no tiene ningún respeto por sí mismo.”

"El Heredero dijo que el Joven Amo no se quitaba la túnica exterior durante el sueño, y claramente trataba de seducirle, haciendo que el Heredero le ayudara a quitársela.”

“El heredero es joven y vigoroso, y de repente vio a alguien durmiendo sin quitarse la ropa exterior. ¿Cómo pudo haber resistido?”

Zhong Wan estaba tan enojado que se mareó y le sonaron los oídos. Bebió un sorbo de té y continuó leyendo: 

"Entonces el Heredero inconscientemente ... te besó".

...

GLOSARIO:

1.- Mayor como de veinte años o más joven. No las mujeres mayores de 30 años. ¬¬

2.- En chino, él-su () y ella-su () suenan exactamente igual cuando se hablan. Así que para localizar esto mejor, tengo a Zhong Wan diciendo "ellos/ellas" en lugar de "él/ella" cuando se refiere a su Kuafu, mientras que Xuan Congxin todavía usa "ella/él".

NOTA DE TRADUCTORA:

YS cuando recordaba a ZW


 ...

ANTERIOR                  INDICE                 SIGUIENTE

 

 

 



Comentarios

Publicar un comentario

TE PUEDE INTERESAR...